Pero con la buena voluntad o con buenas ideas no basta para hacer efectiva esa labor, cuando se trata de colaborar en salvar vidas hay que ser muy eficaz, muy rápido y además ser capaz de integrarse con el resto de equipos que estén trabajando por el fin común.

El trabajo en misiones de emergencia en nuestros días está muy protocolizado en cuanto a la forma de trabajo, y muy profesionalizado en lo que se refiere al personal que lo lleva a cabo por lo tanto quien venga nuevo ha de estar a la altura tanto en la parte técnica como humana.

Los drones cuentan con una serie de ventajas que serán descritas en la ponencia pero también con una serie de inconvenientes que también serán valorados en la exposición.

No sólo la parte técnica debe adaptarse, sino también el eslabón humano debe ser capaz de mantener unos niveles de operatividad que en otras actividades que se lleven a cabo con drones no serán ni parecidos en cuanto a la exigencia. Solamente con una adecuada integración con el resto de unidades terrestres, y aéreas que operen en una emergencia pueden ser realmente útiles los drones, y sólo si de verdad aportan soluciones podrán ser considerados verdaderas herramientas de apoyo en misiones de rescate, búsqueda o en misiones de Protección Civil.